El nuevo gabinete logró el voto de confianza en una larga sesión política por la que se tenía que pasar sí o sí como corresponde. Esa facultad constitucional que tiene el Congreso es algo que no se podía mezquinar, solo porque el Congreso sea de mayoría fujimorista. Sin embargo la estrategia política y de comunicación que los Fujimori están planteando a través de su mayoría en el Congreso es el de la distracción. ¿En qué sentido?

El nuevo gobierno viene con muchos temas positivos, un gabinete técnico, ideológicamente cercano a muchos líderes de opinión, tecnocrático y empresarios, además de contar con simpatía de la población (como todo nuevo gobierno). Los fujimoristas sabían que con su voto o sin su voto el gabinete iba a obtener la confianza. Pero si iban a dar el voto (se vería pésimo que no lo dieran) debían hacerlo a un costo, este costo principal fue que este gobierno debía criticar al anterior todo lo que pudiera, a cómo de lugar y debía jurar y perjurar que no tiene, ni tendrá nada que ver con el anterior, cuasi una hoja de ruta para PPK, algo absolutamente ilógico e innecesario, pero eso pedían. ¿Para qué? ¿Solo porque tienen antipatía a los Humala? ¿Ese es el objetivo político? No, sino el de la distracción.

La estrategia política planteó este objetivo y desde la comunicación se aplicó, con algunas fallas. El primer día del debate se notó una clara diferencia entre los fujimoristas de Lima y conocidos voceros, y la mayoría de nuevos congresistas de las regiones. Mientras los primeros exigían el sacrificio público del gobierno anterior a cambio del voto, los segundos pedían temas importantes para sus regiones. Esto fue tan evidente y peligroso que desencajó a los voceros políticos. Se entró en la dicotomía peligrosa para la estrategia fujimorista “crítica vs trabajo”. Así el segundo día, ajustaron todas y cada una de las intervenciones de los congresistas fujimoristas regionales para que gran parte o todos los minutos de sus intervenciones tengan críticas al gobierno anterior y exigir que el gabinete, como sea, hable de la desgracia de país que según ellos han recibido.

Funcionó, el Ministro Zavala con mucha educación y algunos de sus ministros les dieron carne a los leones y consiguieron el voto. Pero la estrategia no termina ahí, todos y cada uno de los ministros por cuenta propia o a través del Pdte. Del Consejo de Ministros han asegurado que asistirán al Congreso todas las veces que sean necesarias para explicar todo del gobierno anterior.

Distraer de su trabajo al nuevo gobierno es lo más importante ahora para los fujimoristas. No dejar que tenga nada que mostrar los primeros 100 días es algo que deben conseguir. Solo quienes están metidos en política saben lo tedioso y la cantidad de tiempo que se tiene que dedicar del trabajo del Ministro y su gente para obtener y mostrar toda la información detallada que los fujimoristas solicitarán, eso solo en horas hombre. Pero más eficaz será el tiempo que perderán ministros y congresistas en responder a los medios sobre este tema. ¿No lo creen? Han pasado 4 días del voto de confianza y hasta ahora los ministros y el Presidente solo han hablado del gobierno anterior esto y el gobierno anterior aquello; y así no solo hablaran de eso, la edición de los medios se enfoca sobre ese tema, porque es el tema que los fujimoristas han impuesto en la agenda mediática y la comunicación del gobierno está girando sobre ese tema.

Pero ¿qué está haciendo este gobierno? ¿Al gobierno de PPK lo eligieron para criticar al anterior o para trabajar en ese cambio que nos prometieron? Es importante rendir cuentas, sí, pero eso debe ir por cuerdas separadas y no permitir que la atención mediática y energía del nuevo gobierno se centre en responder sobre el gobierno anterior; sino en colocar sus temas de gobierno en la agenda mediática. 

La estrategia fujimorista está en marcha, pero se necesita una respuesta de comunicación política clara. “Vamos dar información sí, pero primero vamos trabajar y la gente lo verá” ¿Quién estaría en contra de eso? Por ejemplo, los peruanos que no tienen agua, esa parte del grupo D-E que votó principalmente por Fujimori pero a quien el Presidente PPK le prometió un cambio, cuando pasen los primeros 100 días, tengo la impresión que valorarán más un programa de agua potente como parte de un articulado discurso de revolución social colocado mediáticamente como un tema de gobierno que una larga perorata de “qué mal hizo el gobierno pasado”. 

Y solo para tener en cuenta, ya pasaron casi 30 días de gobierno, los poco más de 70 días que quedan ¿veremos a los ministros hablando de su trabajo o del mal trabajo del gobierno anterior? Mientras tanto el tiempo y las expectativas de la gente continúan en cuenta regresiva, tic, tac, tic, tac. 

Juan Diego Sotelo R.